Un experimento

broken black flip phone \

Digamos que he decidido hacer un experimento. Después de leer Digital Minimalism de Cal Newport y dado que llevo un tiempo planteándome algunas cosas sobre mis hábitos, he tomado la decisión de desconectarme de las redes sociales durante treinta días. A ver qué sucede y cómo esto afecta a mi productividad y a mi relación con el entorno. Eso no quiere decir que apague el router y lo guarde en un cajón. Internet es mi herramienta de trabajo. Facebook es una plataforma esencial para llegar a nuevos lectores cada día. No obstante, sólo le doy el uso profesional que necesito.

Por el contrario, sí que he decidido dejar a un lado Twitter, Instagram y Youtube durante este periodo. Redes en las que no soy muy activo pero en las que sí dedico horas curioseando o alimentándome de otras opiniones que, en la mayor parte del tiempo, no aportan mucho pero sí influyen en mi manera de pensar. Ingestas de ruido e información que necesitan ser depuradas de mi organismo. No más visitar perfiles ajenos, ni bucear en discusiones banales.

Llamémoslo un ayuno intelectual.

Seguiré actualizando el blog y utilizando Buffer para programar lo que se publica -como vengo haciendo desde hace unos años-, pero me limitaré a estar disponible a través del correo electrónico, por si alguien quiere algo.

No lo hago por romper con todo, ni porque esté en contra de las redes sociales. En absoluto. Hasta el momento, tampoco creo que el uso de éstas haya afectado a mi productividad. Simplemente, tengo curiosidad por entender qué sucede tanto dentro como fuera de mí.

Hasta el 25 de diciembre… si aguanto.