Blue Monday

Hoy he amanecido con la noticia más estúpida que podía leer. El único Blue Monday que conozco es el título de la canción de New Order, y a mí eso sólo me pone de buen humor.

Los portales de noticias y opinión son un mundo de polaridades: razones para ser mejor, razones por las que te sientes mal. Odio sobre cómo la tecnología nos destruye y los beneficios de usarla. Por qué no encuentras pareja y por qué debes deshacerte de ella.

Soy de los que piensa que la tecnología de la que disponemos no destruye a nadie.

El mal de ayer era la televisión, hoy es internet, tu teléfono, tu lo que sea que quieran llamarlo todos esos expertos de pacotilla.

Al carajo un poco con todo eso. Nosotros decidimos si ver el perfil de una cuenta, un vídeo didáctico de cocina o Photoshop o escuchar una lista de jazz. Yo decido si escribir esto o no.

El problema lo tienes tú, yo, nuestro entorno, que no hemos aprendido a lidiar con nuestra disciplina, con nuestros hábitos o con la forma de entender el presente.

Ni la cuesta de enero, ni las nubes del cielo o el frío son motivos para estar triste y, mucho menos, lo que nos diga un panfleto informativo -que de algo tiene que escribir-.

Disfruta el lunes y haz eso que tanto te gusta y tan poco haces, aunque sea por un rato. Haz lo mismo mañana, y pasado, y al día siguiente, y así hasta que te hayas olvidado de que tenías que hacerlo. Permítete vivir la vida, que para eso está.